Preparando a los niños para vivir en un mundo ágil

Es evidente que el sistema educativo actual es el resultado obsoleto de la revolución industrial. El sistema educativo actual no prepara a los estudiantes para un mundo ágil.

La enseñanza debe pasar de la idea de eventos lineales y controlados a no lineales y mayormente caóticos. Este «pequeño» cambio ayudará a los estudiantes a adaptarse a un mundo en el que las habilidades y las formas de pensamiento (o mindset) en el lugar de trabajo pueden cambiar rápidamente.
Creo que estamos en un punto en el que nuestra sociedad necesita repensar la forma en que enseñamos cuando vivimos en un mundo ágil, lleno de empresas que hacen ciclos de trabajo cortos, con inteligencia artificial, y otras tecnologías.

El primer paso es entender los conceptos básicos de la educación. Tenemos que comenzar con lo básico de lo que se enseña en la escuela o la universidad, y lo que no se debería enseñar.
No podemos sólo educar a los estudiantes los fundamentos de la ciencia, la historia, o las matemáticas. Tenemos que enseñarles la importancia del trabajo en equipo y la cooperación. Necesitamos mostrarles cómo trabajar juntos, cómo pueden resolver problemas y tomar mejores decisiones comprendiendo la historia de un grupo de personas y la psicología de la economía.
Pregúntale a un adolescente si conoce diferentes maneras de tomar decisiones, y te dirá que no.

En mi opinión, los programas de las escuelas y universidades deberían enfatizar en cómo trabajar en un mundo de negocios altamente cambiante, donde la automatización aumenta las capacidades humanas pero también donde las disrupciones del mercado multiplican la competencia.

Como las cosas pueden cambiar de un minuto a otro, los niños deben adquirir habilidades para reformular (reframing) constantemente los problemas, y también gestionar su frustración. Muchas veces, en un mundo no lineal, los acontecimientos irán en una dirección diferente a la esperada. Imagínate que tu hijo finalmente consigue un trabajo en una empresa, trabaja duro para lanzar un producto, y justo el día en que su organización lo despliega, dos empresas más ponen un producto mejor en el mercado.

La gente a mi edad no está totalmente preparada para estos escenarios de cambio exponencial que constantemente crean una montaña rusa de sentimientos.

Los niños necesitan aprender a lidiar con la incertidumbre y la ambigüedad. En un mundo ágil, pueden experimentar varias emociones en cortos períodos y ser abrumados por ello. Por eso, enseñar a los estudiantes a manejar la frustración es una habilidad muy importante. Cuanto más entiendan cómo manejar este sentimiento, más sabrán como tratar sus propias emociones.

También es crucial ayudarles a desarrollar habilidades específicas de colaboración y negociación. Esto permitirá a los niños ser más productivos y exitosos en sus carreras.

Por último, deben saber cómo usar la tecnología de manera efectiva y responsable, pero hablaré de ello en otro post.

Debemos empezar a prepararlos para un mundo ágil, pero no sólo como individuos que trabajan en una empresa ágil, sino como personas que forman parte de una sociedad extremadamente cambiante.

Gracias por escucharme,
Erich

Comparte esto:

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *